Estilo emocional

Nos referimos a la capacidad de influir en los demás por medio de dos elementos: la persuasión y el contagio emocional.

Persuasión.

La capacidad de persuadir a los demás es clave para un directivo-líder. En el centro de la capacidad de influir se encuentra el concepto de poder y su ejercicio.

Las fuentes o tipos de poder los podemos resumir en:

1.- De recompensa. Cuando el que ejerce  el poder recompensa a los otros si atienden a sus peticiones.

2.- Sancionador o coercitivo. Se anticipan represalias por parte del que ejerce el poder  cuando no se atiende a sus peticiones.

3.-  Legítimo. Cuando la persona acepta y entiende que el otro puede prescribirle un comportamiento.

4.- De identificación (referente). Cuando existe gran afinidad entre el que intenta influir y la persona o grupo de personas a quien se quiere persuadir. Esto conlleva que se atienda con convencimiento y agrado a las directrices del que ejecuta el poder, lo cual sería deseable para un directivo.

5.- De experto. Cuando la persona que persuade es conocedora y experimentada en el contexto que intenta gestionar.

Las estrategias a tener en cuenta a la hora de llevar a cabo el poder:

1.-  Estrategias de influencias basadas en la alteración de las percepciones. Se trata de modificar las percepciones de los empleados de forma tal que perciban una identificación entre sus objetivos individuales y las acciones que le interesan al directivo o mando. Dentro de esta categoría podemos observar:

1.1-    Intercambio de información. Mediante reuniones grupales se  habla cómo mejorar la actuación.

1.2-     Recomendaciones. En este caso, se sugiere al grupo de empleados que sigan un curso de acción concreta.

2.- No basadas en el cambio de las percepciones. En ocasiones, es necesario tomar decisiones o realizar acciones urgentes que no permiten hacer ver al empleado o empleados sobre quienes se ejerce el poder  que es un comportamiento deseable para ellos. Por ello, hay que utilizar otras estrategias de influencias, concretamente las siguientes:

2.1- Promesas. El sujeto que ejerce la influencia compromete una recompensa a los empleados a cambio de hacer lo que se les pide.

2.2- Amenazas. Se informa a los subordinados cuyo comportamiento se quiere modular que si no se hacen determinada acción, se les aplicarán sanciones. A utilizar de forma excepcional y en casos extremos.

2.3- Estrategias legalistas. El poder se ejerce mediante la legitimidad que confiere un compromiso contractual o acuerdo informal vinculante.

2.4- Peticiones. El directivo informa al empleado   o grupo de determinada acción que le gustaría que realizase.

El contagio emocional.

Junto con la persuasión, el contagio emocional forma parte de la competencia que llamamos estilo emocional. Se puede definir como la influencia ejercida a nivel grupal mediante la práctica de las competencias emocionales básicas con coherencia, integridad (unidad de vida) y el ejemplo. Presenta las siguientes características:

1.- Es una competencia de aplicación muy específica en las organizaciones empresariales.

2.- Responde a nuevos descubrimientos de la neurociencia acerca de cómo cada persona es influenciada por otras.

3.- Es una característica muy importante de un líder.

4.- Conecta de forma profunda con los valores personales que tenga el líder, confiriendo autenticidad a su actuación.

En relación a este concepto hay que tener en cuenta que el cerebro funciona como un sistema abierto. Por ello, los estados emocionales de las personas dependen de las conexiones con el mundo exterior, y especialmente con otras personas con quienes se relacionan. Esto explicaría por qué un líder que practicara y fomentara una gestión emocionalmente inteligente, podría provocar un impacto positivo en los miembros de toda la organización. Por tanto, es importante que un líder tome conciencia de cómo su comportamiento, estilo y actitud emocional pueden afectar de manera notable el rendimiento de todos los que le rodean, lo cual supone que su gestión la debe practicar con la responsabilidad debida a este respeto.

Las empresas  y sus directivos deben ser conscientes que las personas merecen ser tratadas  con dignidad  y de forma integral. Deben ser conscientes de que contando con sus trabajadores los resultados mejoran.

La visibilidad de un líder no conlleva una fachada ni una manipulación de los demás en provecho propio, sino la actuación íntegra y honesta de su ser.

En definitiva, la persuasión, la influencia y el poder se refieren al mismo fenómeno, desde perspectivas ligeramente diferentes. No obstante todas tienen en común que el impacto emocional de la influencia es tanto individual, como colectivo; éste último ámbito de influencia debe ser particularmente característico de los directivos- líderes, al tener un elevado grado de visibilidad en la organización.